Cuando un Cd convence por su portada

Pertenezco a la generación que compraba Cd Musicales. Soy de aquellos que disfrutaban ir a la tienda de discos y descubrir un nuevo artista o encontrar una rareza de Björk. Soy, de los que hallaba nuevos sonidos escuchándolos de pie en la tienda. Y también soy, de los que de vez en cuando, compraba un álbum solamente por el diseño de su cubierta. Todo este ritual, de sábado por la tarde, se perdió. La semana pasada tuve un ataque de nostalgia y volví a comprar un disco compacto. Es de Stacey Clark. Aún no lo he escuchado lo suficiente, pero me encantan sus  ilustraciones. Me transmiten inocencia, búsqueda e ilusión. La misma ilusión que sentí en el momento de tenerlo en mis manos.